¿Cómo están chicos? ¡Este es el segundo blog que escribo para ustedes y me encanta!

Hoy tocaremos algo muy interesante y creo que para algunos controversial: Cómo vemos a las mujeres. No se cuántos han escuchado la frase que dice “de la forma te ven, te tratan”.

Yo muchas veces he escuchado esa frase y siempre lo relacioné con la manera que uno debía comportarse, hablar o relacionarse con el otro para que puedan tratarte de la misma manera.   En parte es muy cierto, sin embargo, hoy quiero que nos enfoquemos desde el punto de vista de la persona que mira y en este caso de cómo los varones ven a las mujeres.

Hoy no quisiera cuestionar si es que se debe mirar o no a una mujer; por que es inevitable hacerlo; ningún varón puede andar negando o evadiendo a las mujeres; esa no es la idea. Sino quiero que evalúen el sentido que dan a sus miradas.

Normalmente toda persona se detiene o toma tiempo en observar algo que está cautivando sus ojos o cuando le genera una gran admiración o gusto. Cuando pasa eso, solemos ser muy detallistas y empezamos a profundizar en el objeto hasta conocer todos los detalles. Esta misma experiencia pasa en nuestras relaciones, en especial entre un hombre y una mujer. Por nuestros ojos no solo entran imágenes, entran conceptos, entran deseos y mucha de esta información se materializa en la forma cómo tratamos a las personas. No digo que los hombres no deben admirar la belleza de una mujer, sino que cuiden la superficialidad que tiene sus miradas.

Hay 2 aspectos que proyectan las miradas: significado y valor. Cada vez que un varón contempla a una mujer le esta dando indirectamente un significado, un concepto, ese significado puede ser bueno o malo, dependerá de la forma cómo aprendiste y ese significado generará el concepto que puedes tener de una mujer. Es por eso que una mujer puede tener diferentes significados para cada varón que la observa. Todo depende del ojo que la está observando.

Lo segundo que aporta una mirada es “valor”; de la manera que miras a una mujer determinará el valor que le das. Es ahí donde los varones tienen un desafío, ya que en algunos casos están acostumbrado a darle valor solo a un aspecto de la mujer y no ven el valor integral de la misma. Si solo valoras el aspecto físico de la mujer, el día que por los años el físico de una mujer no sea el mismo; ese valor desaparecerá.

Mirar o admirar no es malo; pero creo que los varones (y también esto aplica a todos) pueden dar un mejor significado y valor a la forma de sus miradas. No cabe duda que toda mujer le encanta sentirse admirada, pero creo que muchas de nosotras apreciamos más cuando nos sentimos valoradas por lo que somos y no solo por lo aparentamos.

Hoy te invito que la próxima vez que contemples a una mujer pienses y te retes a ir más allá de lo que ves; dándole un profundo significado y valor a la mujer.

 

¡Te deseo una excelente semana!